Washington, D.C., 12 de junio de 2025.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, firmó este jueves una ley que revierte la normativa del estado de California que prohibía la venta de vehículos de gasolina a partir de 2035, medida que había sido impulsada por autoridades demócratas con el objetivo de acelerar la transición hacia automóviles eléctricos.
Desde la Casa Blanca, Trump justificó la decisión asegurando que los estadounidenses “deben tener la libertad de elegir entre un auto eléctrico, uno de gasolina o uno híbrido”.
El Congreso, con mayoría republicana, aprobó en mayo la revocación de la norma establecida por el gobernador demócrata Gavin Newsom, uno de los principales opositores del actual presidente.
“Querían destruir nuestras cadenas de suministro y entregar los empleos del sector automotriz a China”, acusó Trump durante el anuncio.
Además de eliminar la restricción de California, la nueva legislación anula otras políticas ambientales estatales, como los límites a las emisiones de óxidos de nitrógeno y otras regulaciones sobre gases contaminantes provenientes de vehículos.
California ha sido históricamente un referente nacional en normas ambientales, tanto en la promoción de vehículos eléctricos como en el combate a la contaminación atmosférica.
Sin embargo, con esta ley firmada por Trump, otros estados que buscaban adoptar medidas similares también verán bloqueadas sus iniciativas.
Este movimiento se suma a otras decisiones de la actual administración en contra de las energías limpias y políticas ambientales.
Durante la firma, Trump también criticó las energías renovables, señalando que:
“Los molinos de viento están matando al país… Se oxidan, se vuelven chatarra. Es la mayor estafa de la historia.”
La decisión ha generado críticas entre ambientalistas, legisladores demócratas y defensores del medio ambiente, quienes advierten sobre el retroceso en la lucha contra el cambio climático y la contaminación del aire.
