El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, informó que su administración solicitará la pena de muerte para quienes cometan asesinatos en Washington, en el marco de su estrategia para reducir la criminalidad en la capital.
Durante la séptima reunión de su gabinete, Trump calificó la medida como “una prevención muy fuerte” y aseguró que toda su administración la respalda. “No sé si estamos preparados para esto en este país. Pero no tenemos otra opción”, agregó el mandatario.
El anuncio se produce en un contexto en el que Trump tomó el control de la seguridad de Washington por 30 días, activando a 800 miembros de la Guardia Nacional y recibiendo apoyo de seis estados gobernados por republicanos, lo que eleva el número de efectivos en la ciudad a unos 2 mil.
Además, patrullan la Policía Metropolitana y agentes federales del FBI, la DEA y el ICE.
Según la fiscal general, Pam Bondi, hasta el momento se han arrestado 1 094 personas y se han incautado 115 armas ilegales.
Organizaciones y activistas han expresado preocupación de que esta estrategia pueda afectar a la población migrante.
