El Departamento de Justicia de Estados Unidos presentó cargos federales contra Decarlos Brown Jr., quien fue detenido tras apuñalar a Iryna Zarutska, una refugiada ucraniana de 23 años, en un tren cerca de Carolina del Norte el mes pasado. Debido a la gravedad del delito, Brown podría enfrentar la pena de muerte.
El incidente ha generado cuestionamientos sobre cómo el sistema judicial manejaba a Brown, quien contaba con 14 casos criminales previos, incluido un arresto reciente por llamadas al 911 que denunciaban persecución.
Testimonios familiares señalan que el hombre había sido diagnosticado con esquizofrenia y que su madre buscó internamiento psiquiátrico involuntario durante el año.
El ataque fue captado en video y muestra a Zarutska sentada frente a Brown, quien la apuñaló sin interacción previa, causando su muerte inmediata.
Los fiscales locales y federales presentaron cargos de asesinato en primer grado y por causar la muerte en un sistema de transporte masivo, delitos que podrían implicar cadena perpetua o pena de muerte.
La secretaria de Justicia, Pam Bondi, declaró que se buscará la máxima condena y que el caso evidencia preocupaciones sobre políticas de seguridad y manejo del crimen violento en el transporte público.