La jueza 44 con función de conocimiento de Bogotá, Sandra Liliana Heredia, condenó este viernes al expresidente colombiano Álvaro Uribe Vélez a 12 años de prisión domiciliaria por los delitos de fraude procesal y soborno en actuación penal, en un caso que marca un hito al convertirlo en el primer exmandatario del país en recibir una sentencia penal.
La resolución judicial también incluye una multa equivalente a 578 mil dólares y la inhabilitación para ejercer derechos y funciones públicas.
Aunque Uribe fue absuelto del delito de soborno, la jueza sostuvo su responsabilidad en la manipulación de testigos a través de terceros.
El proceso legal, que se ha prolongado por casi 13 años, ha polarizado profundamente a la opinión pública en Colombia.
Mientras los defensores del exmandatario argumentan que ha sido víctima de una persecución política, sus críticos insisten en que se ha hecho justicia.
Uribe, de 73 años, presidió Colombia entre 2002 y 2010 y es reconocido por liderar una ofensiva militar contra las guerrillas durante el conflicto armado.
Durante el juicio, se declaró inocente y su defensa anunció que apelará el fallo ante el Tribunal Superior de Bogotá.
La sentencia se da en la antesala de las elecciones presidenciales y legislativas de 2026, en las que varios aliados del expresidente buscarán cargos de elección popular.
Analistas anticipan posibles repercusiones en las relaciones diplomáticas con Estados Unidos, particularmente por los señalamientos del senador Marco Rubio y la respuesta del actual mandatario Gustavo Petro, quien defendió la independencia del poder judicial.