El empresario Elon Musk apareció este viernes con un visible moretón junto a su ojo derecho durante su despedida oficial en la Casa Blanca, donde puso fin a su papel como líder del Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE).
Ante los medios, Musk atribuyó la marca a un incidente doméstico: “Estaba jugando con el pequeño X. Le dije: ‘Anda, dame un puñetazo en la cara’, y lo hizo”, relató entre risas, en referencia a su hijo de cinco años.
Durante el acto en el Despacho Oval, Musk también bromeó sobre un reciente episodio protagonizado por Emmanuel Macron, cuando el presidente francés recibió una palmada de su esposa Brigitte al llegar a Vietnam. "No he estado cerca de Francia", dijo irónicamente el magnate, aludiendo a la polémica que suscitó el gesto.
El presidente Donald Trump encabezó la ceremonia y colmó de elogios a Musk por su labor en el gobierno, describiéndolo como “uno de los líderes empresariales e innovadores más grandes que el mundo haya dado”.
“El servicio de Elon a Estados Unidos ha sido incomparable en la historia moderna”, afirmó Trump, quien además le entregó una simbólica llave "en nombre del pueblo estadounidense" como reconocimiento a su trabajo.
Aseguró que, gracias a DOGE, se han detectado fraudes, reducido desperdicios y modernizado sistemas gubernamentales ineficientes.
Musk, por su parte, aseguró que su salida responde a la expiración de su contrato temporal de 130 días, pero prometió seguir colaborando: “No es el fin de DOGE. Es como una forma de vida”. Confirmó que continuará como asesor y amigo del presidente.
Durante su gestión, DOGE impulsó recortes significativos en diversas agencias gubernamentales, generando un ahorro de aproximadamente 175 mil millones de dólares, según cifras oficiales.
No obstante, Musk evitó responder a la prensa sobre un reportaje publicado ese mismo día por The New York Times, el cual lo acusa de haber consumido drogas de forma habitual durante la campaña electoral pasada.
El texto menciona sustancias como éxtasis, hongos psicodélicos, Adderall y ketamina.Musk descalificó al diario:
“¿Es la misma publicación que ganó un Pulitzer por noticias falsas sobre el Rusiagate? ¡Creo que sí!”.
Acto seguido, dio paso a otra pregunta sin abordar directamente las acusaciones.