Durante la sesión de este viernes en la Asamblea General de la ONU, varias delegaciones abandonaron la sala justo antes del discurso del primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu.
Al iniciar su intervención, la sala estaba notablemente vacía, reflejando el boicot de algunos representantes.
El discurso, que era el primero de la jornada, generó gran expectativa y movimientos de protesta entre los asistentes.
Para contrarrestar las críticas, personas pro israelíes presentes en la tribuna del público aplaudieron en varias ocasiones al mandatario.
Este hecho marca un momento de tensión política en la Asamblea y evidencia las divisiones sobre la situación internacional.