La Cámara de Diputados aprobó en lo general la reforma que transfiere al Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) las atribuciones del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval), incluyendo la medición de pobreza y la evaluación de programas sociales.
Con 353 votos a favor y 126 en contra, se aprobaron cambios a tres leyes clave: la Ley General de Desarrollo Social, la Ley Federal de Presupuesto y Responsabilidad Hacendaria y la Ley General de Contabilidad Gubernamental.
Entre los puntos más controvertidos se encuentra la eliminación de la facultad del Coneval para modificar o suspender programas sociales, así como la capacidad de la Cámara de Diputados para reducir su presupuesto.
La oposición advirtió que estos cambios representan un retroceso en la transparencia, ya que permitirían al gobierno evaluar sus propios programas sin contrapesos técnicos.
Legisladores del PAN, PRI y MC criticaron que el INEGI, aunque es un órgano técnico confiable, no fue diseñado para ejercer tareas de evaluación en política social.
Por su parte, Morena y sus aliados defendieron la reforma argumentando que se fortalece la evaluación al integrarla con criterios técnicos, con la garantía de continuidad en la medición de pobreza bajo estándares científicos y homologados.
El debate seguirá en lo particular, mientras persiste la discusión sobre la autonomía y vigilancia de los programas sociales en México.