A un año del trágico accidente en el bar Rich, ubicado en la plaza Alttus de esta ciudad, familiares de las víctimas continúan exigiendo justicia y una respuesta integral por parte de las autoridades estatales y municipales.
El colapso de un barandal de cristal en el tercer nivel del establecimiento, ocurrido el 7 de junio de 2023, provocó la muerte de Manuel, de 21 años, y Roy, de 17, además de dejar a ocho jóvenes heridos, dos de ellos con secuelas permanentes.
El sitio del accidente permanece acordonado con cintas y sellos de clausura.
El cristal dañado aún no ha sido repuesto, y las reparaciones en la plaza continúan inconclusas, lo que, según los familiares, refleja la falta de compromiso con la memoria de las víctimas y la prevención de futuros incidentes.
Ramón Infante, padre de Manuel, denunció que aunque tres personas identificadas como Nancy “N”, Francisco “N” y Ulises “N” fueron detenidas como presuntos responsables por operar el lugar con permisos irregulares, funcionarios de diversas dependencias como Protección Civil, Gobernación, Comercio y Coepris no han sido procesados, a pesar de haber permitido el funcionamiento del establecimiento bajo la fachada de restaurante, sin cumplir con las medidas de seguridad correspondientes.
El proceso judicial sigue sin sentencia, mientras las familias afectadas enfrentan obstáculos burocráticos. El caso de Isabella, una joven sobreviviente que ha sido sometida a 15 cirugías, evidencia la falta de atención institucional.
Sus familiares denuncian la omisión de la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas (CEAV), que no ha entregado documentación clave para el avance del caso.
Tras la presión social, el Ayuntamiento capitalino reformó el reglamento de comercio para cancelar licencias a establecimientos que permitan el ingreso a menores de edad.
Sin embargo, los familiares consideran que estas acciones fueron tardías y no abordan de fondo la responsabilidad institucional ni garantizan justicia plena.